Viajó de vacaciones a los Estados Unidos y terminó quedándose

Viajó de vacaciones a los Estados Unidos y terminó quedándose

   Este caso para muchos puede ser común en medio de la diáspora venezolana, personas que desde hace tiempo tenían pasajes comprados para disfrutar unas vacaciones en familia y resulta que viajaron, se divirtieron y al llegar el momento de regresar, deciden quedarse y no volver. Esto le ocurrió a la protagonista de esta historia, una profesional de la medicina que al ver el riesgo que corrían sus hijas en Venezuela, prefirió quedarse y empezar de cero. #MiVuelo les presenta a Lourdes Lobo.

   El 30 de julio de 2017, salió Lourdes de  Venezuela, con sus dos hijas y esposo. Visitaría a su hermana en la ciudad de Orlando. Antes de ese viaje, justo en el mes de junio había ocurrido un episodio delicado con su hija y un Guardia Nacional en medio de las llamadas guarimbas, esto sucede en Valencia, edo. Carabobo. A raíz de ese hecho Lourdes empezó a sentir miedo y a temer por la vida de sus hijas y toda su familia, por lo que antes de regresar de esas vacaciones evaluaron quedarse, dijo “lo vi como una señal”. 

  Cuando pudo trabajar en los Estados Unidos sus primeros empleos fueron de housekeeping, lo que traduce como limpieza interna, trabajo doméstico en diferentes hoteles. Empezó en unas villas, donde se sintió humillada, maltratada, asegura que fue un shock muy fuerte, por tener que realizar cosas a las cuales no estaba acostumbrada. Luego entró a un hotel grande de siete pisos, se sentía triste por lo que hacía, dijo “recuerdo que un día en la hora de la comida una mujer mexicana le decía a otra, esta mañana le dije a mi hijo que estudiara mucho para que no le tocara hacer esto”, allí nos cuenta Lourdes que al escuchar esa conversación se fue en llanto, porque pensó en todo lo que ella había estudiado para precisamente terminar limpiando habitaciones en un hotel. Aclaró que su intención no era discriminar a nadie, ni quitarles crédito por la labor tan fuerte que hacen estas personas, pero en su caso no era usual lo que estaba viviendo.

  Pasaron los días y nuevamente Lourdes se encontraba deprimida, un señor venezolano que la vio, le dijo que eso que estaban haciendo era lo más difícil y que luego de aprenderlo y resistir ya sería como una universidad, entonces empezó a ver las cosas de otro modo, la doctora Lourdes veía cada piso con un enfoque distinto, buscaba representarlo como algo en su vida que debía limpiar, entonces fue subiendo, aprendió cada detalle hasta que terminaron felicitándola y fue cuando al día siguiente renunció, porque ya había aprendido lo que tenía que aprender en ese lugar. Se fue a un hotel más pequeño, pero no estuvo mucho tiempo trabajando allí porque se le presentó la oportunidad de entrar en una imprenta, donde conoció a muchas personas, hizo amistades, asegura que su paso por esa imprenta fue importante, se sintió aceptada, sin duda fue un paso emocionalmente bueno. 

   

   Lourdes es médico, en Venezuela pasaba consultas privadas de sexualidad, ofrecía atención a parejas. En el 2003 inicia un “programa para la LOPNA de prevención, atención a niños abusados sexualmente” en los municipios Naguanagua, Valencia y San Diego del edo, Carabobo. Con su voz sensiblemente quebrada, nos compartió que dejar su pasión, dejar lo que hacía en su país fue muy difícil.  Además, siente mucho haber dejado a su familia, mamá, hermanos, a sus amigas, pacientes, dejar de pasar consultas, “yo amo a mi trabajo”, dijo.

  “Sentí que mi vida no tenía sentido”, expresó Lourdes que la tristeza fue muy fuerte. Un día se dijo, “todo lo aprendido para ayudar a otros, tiene que servir para ayudarme a mí misma”. Es en ese momento fue cuando los cambios en la vida de Lourdes empezaron a notarse. Retomó su pasión logrando alcanzar su bienestar y el de otros, expandiendo con profesionalismo sus terapias a personas de otras nacionalidades, a puertorriqueños, colombianos.

   La creadora del reto “30 días de sexo”, decidió emprender dando charlas, talleres, promocionó sus consultas, empezó a llevar ella misma sus redes sociales, antes lo hacía un community manager. Sus conferencias son dirigidas bajo su experiencia como terapeuta sexual y coach. La más reciente fue dictada el pasado sábado 28 de septiembre, bajo el nombre “Erotismo: el arte que debes aprender”. Sin duda el cambio fue radical y la Lourdes de hoy es otra, distinta a la que, hacía vida en Venezuela, distinta a la Lourdes que llegó a los Estados Unidos de vacaciones, hoy vemos a un ser lleno de luz que brilla en su actuar, con cada palabra llena de paz, con eso tan hermoso que transmite y con las ganas de crecer y dar cada día lo mejor de ella.

   Desde “Migrantes en Vuelo”, le damos las gracias por permitirnos contar su historia. Estamos seguros de que lograrás todo lo que te propongas, que la Lourdes que escuchó muchos audios para no perder su foco, para formarse, para reinventarse, logró salir de la tristeza para encontrase más fortalecida y pensar en grande.

  A ustedes que leen esta historia, si estas atravesando una profunda tristeza, escucha audios de autoayuda, que te motiven, busca ayuda, busca eso que tanto te motiva y emprende, entiende que #TuSiPuedes.

Hasta la próxima historia.

Se despide,

Adriana Henríquez.
@migrantesenvuelo