Emigró y se convirtió en life coach para ayudar a otros con su propósito

   Ha dedicado gran parte de su vida a la docencia. Emigrar no ha sido fácil para ella, sin embargo, hoy agradece el hecho de estar donde está. Desde Florida ayuda a muchas personas con problemas mentales, la orientación ha sido su vocación. Salió de Venezuela por tierra hasta Colombia y de allí empezó a vivir su cruzada migratoria. #MiVuelo les presenta a Yenisse González.

Yenisse González, venezolana en Estados Unidos

   Llegó a los Estados Unidos el 3 de abril de 2015. La decisión de emigrar fue debido a la situación política social de Venezuela, cuenta Yenisse que les tocó muy fuerte a su familia, dijo “el año 2014 fue un año muy difícil para nosotros, las protestas a la dictadura venezolana nos pusieron en la mira del régimen, fuimos víctimas de allanamiento, persecución y una de mis hijas tenía una orden de arresto. A ella la saqué del país en abril del 2014, salimos por tierra hacia Colombia, aunque no fue hasta el 22 de julio de ese mismo año cuando la pude enviar a Estados Unidos. Ese día fue muy triste, pero muy tranquilizador a la vez. Sentí que al fin ella estaría protegida”.

   En su país Yenisse se dedicaba a la docencia y a la orientación, siempre estuvo en el área educativa, trabajó en escuelas y liceos, también dictó talleres para padres y de crecimiento personal. Al llegar a los Estados Unidos todo cambió y su primer trabajo fue de limpieza. Señaló, “una amiga me ofreció que limpiara su oficina. Yo quería limpiar también su casa. El trabajo es una manera de ganarnos la vida, no importa qué tan duro pueda ser, siempre que hagamos algo que sepamos hacer, que sea honesto y que el pago vaya en función de nuestra labor. En Venezuela sólo limpiaba mi casa, y aunque no lo creas, disfruté mucho limpiando esa oficina”.

   Al peguntarle por qué había escogido los Estados Unidos para emigrar, respondió que en este país vive su hijo mayor desde hace 20 años y aunque emigrar no es una decisión sencilla, elegir sitios donde conozcas a alguien o tengas el apoyo de alguien, hace menos dura la carga, da confianza y seguridad.

   Una de las cosas más difíciles que ha podido vivir Yenisse junto a su esposo es que precisamente él no conseguía trabajo, sin embargo, la unión, el apoyo mutuo y el amor sirvieron de gran apoyo en ese momento complicado. Es así como muchos deben canalizar esos casos, muchas familias se fracturan con el ritmo abrumador de ese nuevo país al que emigraron, pero la comunicación y apoyo es fundamental.

Yenisse junto a su esposo.

   Esta venezolana que extraña hasta las montañas de su tierra dijo, “yo me levantaba en Maracay viendo montañas, extraño el aire, extraño a mi familia, mis vecinos, mis amigos, mis compañeros de trabajo y mis alumnos, aunque muchos ya están regados en otras partes del mundo. Extraño la alegría del venezolano, las empanadas de la esquina, las celebraciones familiares… Y puedo seguir enumerando cosas que extraño, son muchas. Sin embargo, doy gracias por estar aquí y ahora, viviendo algo diferente, creciendo como ser humano”.

 

 Autora del libro ¿Y si la culpa no es de la vaca?

   Yenisse ha trabajado ayudando a mujeres adictas y alcohólicas, actualmente trabaja como Case Manager en una compañía que trata a personas con trastornos mentales, ese es su empleo, le gusta porque su profesión es de ayuda. Su emprendimiento está en el área del coaching y el crecimiento personal. “Desde hace año y medio me dedico también a atender clientes online, dicto talleres de crecimiento personal a grupos, también he recibido contratos de organizaciones, me uní a un grupo latinoamericano “Acadmiasweb.com” en donde tenemos cursos asincrónicos en esa página. Somos 18 Academias en un solo lugar ofreciendo cursos de todo tipo, muy útiles especialmente en esta “nueva normalidad” donde lo presencial se hace riesgoso”.

   Yenisse es la autora del libro ¿Y si la culpa no es de la vaca? y a través de esta obra literaria lleva un gran mensaje de autoayuda a muchos. En Instagram la pueden ubicar como @yenisseg_lifecoach allí motiva y orienta con su gran trabajo.


   Gracias Yenisse por regalarnos estos minutos y compartir tu experiencia. Admiramos tu disposición de ayuda, colaboración, eres un ser humano integro y estoy orgullosa de haberte conocido y compartir más que un live.

   El mensaje de Yenisse es corto pero cargado de mucho dijo “tener un propósito, ser siempre mejores cada día, y hacer lo mejor que podemos”.

   A ustedes gracias por leer esta historia. Me despido hasta la próxima

Adriana Henríquez

@migrantesenvuelo



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